El año que viene no solo deja el puesto su presidente Robert Zoellick, un estudioso de los precios de las materias primas y de los primeros en advertir que la crisis financiera iba a reforzar las cotizaciones de los granos.
También parte Pamela Cox, militante del partido demócrata y la vice presidenta para América latina. Cox tendrá ahora la responsabilidad sobre Asia en lo que se considera un ascenso. Esta ejecutiva supo defender al país del lobby de los fondos buitres que cuestionan los préstamos del banco a la Argentina.
Últimamente, los bonistas presionaron al congreso de EE.UU. para que cortara la asistencia, dado que el Ciadi, el tribunal arbitral del Banco Mundial, había fallado contra la Argentina en tres casos y el país no pagó aún esas sentencias. Hasta ahora, el parlamento estadounidense no intervino.
Y desde el Banco Mundial deslizaron que el Ciadi estaba preparado para accionar ante fallos adversos a los privados y no en el caso de que la sentencia la tengan que pagar los estados.
Los vinos argentinos no la están pasando bien en Estados Unidos y algunos especialistas temen que al Malbec le suceda lo mismo que a los australianos que se las vieron en figurillas cuando la variedad Syrah pasó de moda.
ProMendoza parece haber recogido el guante y con un conjunto de bodegas entre las que se cuentan Dante Robino y Fin del Mundo decidió tener presencia estelar en Global Wines, la feria que arranca en Miami y define la comercialización en el país del Norte. El dato es que busca promocionar, además del Malbec, al ascendente Torrontés, cuya cuna es la provincia de Salta.
Con la jubilación en manos del Estado, al francés BNP Paribas se le ocurrió un sistema similar a los que existen en EE.UU. para ejecutivos. Se llaman planes de pensión corporativos donde son líderes con un fondo que cuenta con US$ 100 millones de 5.800 clientes de 50 empresas.
El gerente Marcelo Bianchi asegura que es un instrumento que sirve a las compañías para retener a empleados de puestos clave. Se trata de un ahorro financiado con el aporte de la empresa y del propio empleado. Y aclara que en caso de finalizar la relación laboral antes de la jubilación, estos planes permiten disponer de lo acumulado hasta ese momento.
En los años 50, el Banco Mundial empezó a otorgar préstamos a países en desarrollo, destinados específicamente para la construcción de infraestructura, especialmente sistemas de electricidad y de carreteras. A finales de los 60, bajo el ex-Secretario de Defensa de los EEUU Robert McNamara, el Banco oficialmente cambió su enfoque a la eliminación de la pobreza. Durante toda la década de los 70, el BM prestaba dinero libremente, mucho de ello a gobiernos autocráticos y represivos, y enormes cantidades se malgastaron o simplemente desaparecieron. Creció rápidamente el endeudamiento de los países pobres. Deuda paises con Banco Mundial Bajo el liderazgo de McNamara, la cantidad debida por los países del Sur al Banco Mundial aumentó de 2.700 millones de dólares hasta 12.000 millones. Y cuando, en los años 80, llegó la crisis de la deuda de los países del Sur, el Banco Mundial colaboró con el FMI para imponerles las políticas de ajuste estructural (PAE). Las dos instituciones obligaron a los países endeudados a devaluar sus monedas, reducir sus subsidios para alimentos básicos, elevar las tasas de interés, reducir sus regulaciones sobre la inversión, reducir o eliminar servicios públicos, bajar sus aranceles, y reducir sus presupuestos, todo con el objetivo de reorientar las economías de los países hacia la exportación. Bajo estas políticas, el crecimiento económico cayó en picado, la deuda se expandió (llegando a un total mundial de casi tres billones de dólares en 1990), y han crecido la pobreza, la miseria, y la concentración de riqueza en los países endeudados.
El la última década el Banco, bajo el presidente James Wolfeson, ha respondido a una variedad de críticas adoptando una nueva imagen. En 1999, el Banco oficialmente abandonó el uso de las PAE y pretendió presentarse como una institución transparente y abierta al diálogo y la crítica. Además, está destinando más recursos a temas sociales como la educación, la salud, y el apoyo a pequeños productores. Sin embargo, críticos del Banco Mundial sostienen que los cambios son más bien superficiales. El Banco, por ejemplo, no ha hecho ningún cambio en su estructura gubernamental para dar más representación a los países del Sur, ni ha considerado cancelar la deuda que le deben los países más pobres.
fuente: Clarin
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